Recetas de Amor!

Para los amigos, los amores, los amores después del amor y la bella familia!

Te digo que a las heridas de mi corazón es como si hoy les hubiera echao limón... Auchhhh!

Thursday, March 18, 2010

Lomo al Trapo para un Amigo Hombre!

De la adolescencia solo dos cosas he podido realmente extrañar. La primera es la posibilidad de comer hasta el cansancio y no tener que, al día siguiente, preocuparme por quemar las calorías que he consumido. Extraño la gula y la glotonería sin remordimiento! Pero digamos que esto lo he podido manejar, troto hasta el cansancio y las dietas son mis “guías” permanentes. 

No obstante,  lo que en el fondo  lamento es la dicha y espontaneidad que  la adolescencia tiene cuando se trata de tener   amigos hombres. Si, los amigos con falo, con testosterona, que sudan y solo piensan en sexo, fútbol y comer.

Esos eran mis amigos de la adolescencia, hombres, la mayoría de ellos. Por supuesto que no era la amistad inocente y pura, siempre existía la posibilidad que el trago, la noche y la fiesta nos llevaran al beso equivocado y a la revolcada que calmaba  las hormonas, pero eran amigos  y seguían siendo amigos, el juego de la noche anterior se convertía en secreto a gritos en los pasillos del colegio y luego,  en el salón de clase, yo seguía prestándoles mis exámenes de física y ellos me ayudaban con la química.

Esto dejo de pasar en la adultez, ahora que los  treinta se saborean y  dejamos de ser jóvenes adolescentes para  convertimos en jóvenes con responsabilidades y “proyectos de vida”, los amigos hombres se van: Se casan,  se ennovian, se vuelven ejecutivos exitosos  con egos extraordinarios o simplemente se van y se pierden. Es como si se viviera un exterminio de amigos con falo, se da  muerte a cada uno de ellos, sin compasión y sin remedio, es como un holocausto de amistades masculinas, quemamos a brasas a nuestros amigos hombres. 
 

Debo confesar que hoy  extraño a mis amigos hombres, con los que la emocionalidad no existe y cuando existe se cura en licor y fiesta. Porque no son amigos que se convierten en “una amiga más”, son amigos hombres, con los que se tienen conversaciones desde el dialogo de un hombre y una mujer y no se duda en que se vive al filo de esa amistad…

Con esta nostalgia por los amigos fálicos debo confesar que la vida me ha premiado y me ha dejado el único amigo sobreviviente de tal holocausto: Mi amigo Juan David. Si así es, no sé si será el afortunado o desafortunado sobreviviente,  pero aquí sigue, ya casado y con dos hijos ha tenido que seguir viviendo mi eterna adolescencia, los guayabos sentimentales y el turno por novio que llega, pero aquí seguimos  amigos o más amigos que cuando nos conocimos. El muta de amigos, busca “parejas de amigos”,  pero hasta ahora todos han fallado! Yo me mantengo, y es que hago las veces de pareja de amigos, eso si me toca doblar mis roles y casi que llego a tener el don de la ubicuidad porque troto  y tomo  con él, pero también  animo las bellas  conversaciones con Angelita (su esposa), la cual, no es por nada, es la que hace que yo siga siendo amiga de Juan. Para aquellos  que vivieron el fuego del holocausto de amigos  masculinos y para él que aún se mantiene, un Lomo Al Trapo!

Ingredientes:
Un lomo de res.
Manojo de romero y tomillo.
1 ½ de lienzo.
Pita de hilo
Una fogata.
Sal marina.
Vino tinto

El lomo al trapo es ideal para comerlo en fincas, es súper fácil de preparar, tiene unos sabores y olores inigualables. Esta receta la preparé en una finca en compañía de amigos y amigas, bailamos Calamaro (para bailar Calamaro se necesitan varias botellas de vino) y comimos como dioses! Para los que allí estuvieron y para Juanda y Angela este Lomo al Trapo!

  1. Coloque el lomo sobre el comienzo del lienzo extendido dejando unos 25 cm de espacio desde el borde.
  2. Agregue una copa de vino, esparciéndola por el lienzo. Tenga en cuenta que el lienzo mojado de vino solo sea ¼ de la tela.
  3. Cubra el lomo con abundante sal marina, debe quedar completamente cubierto pues es la sal la que lo protege del fuego.
  4. Ponga las ramitas de romero o de tomillo sobre el lomo.
  5. Envuelva el lomo en el lienzo. Este debe quedar completamente cubierto y debe alcanzar varias vueltas con la tela.
  6. Amarre el lomo con la pita.
  7. Ponga el lomo  en las llamas (ojo son llamas, no carbón) de la fogata o la chimenea. Déjelo por 10 minutos por un lado y luego otros 10 minutos por el otro lado. 
  8. Retírelo del fuego y golpéelo para que la tela quemada empiece a abrirse. Deje reposar el lomo por un rato así los jugos se mantienen. Córtelo en medallones, tómelo con vino! 
http://www.youtube.com/watch?v=bSFbE_lDQo0

1 comment:

  1. Huy Silvis, que nostalgia que me dió tu post. Espero que compartamos muchos más lomos al trapo en nuestra vida. Hay que aclarar, que desafortunada o afortunadamente, no tuve la suerte de los otros "falos desaparecidos"...me refiero a "la calmada de hormonas" jejej.

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